Entrada la madrugada, Iván Vacchiani, agente de la Inteligencia Italiana, cierra tras de sí la puerta del apartamento de Ana Alcobas, en Barcelona. Meditabundo, deambula por las calles de la ciudad. En la plaza Real se topa con un extraño hombre ataviado con unas gafas de sol y una gabardina, y asegura ser escritor. Poco rato después, en tanto que Iván inicia una singular colaboración literaria con él, la vida de Ana y Fausto se traslada a unas páginas en blanco. Transcurridos dos años, un misterioso hombre acude a la librería de Fausto Pietralunga, en Maiori, para hacerle entrega de un manuscrito. Tras su marcha, Ana y él deberán presenciar cómo las vicisitudes de un comprometido pasado parecen cobrar vida.